La comunidad educativa, las familias y el alumnado, también de las poblaciones más castigadas por la riada como Paiporta, Albal, Catarroja o Alfafar, unas 5.000 personas —según la cifra facilitada por la Delegación del Gobierno— en total, han recorrido esta tarde las calles del centro de València, desde la plaza de San Agustín hasta la plaza de la Virgen, para denunciar la "gestión deficiente y desorganizada" de la Conselleria de Educación y de la Generalitat ante las graves consecuencias de la DANA, que dejó casi un centenar de centros escolares afectados, y para exigir que no se ponga en riesgo "el uso del valenciano como lengua vehicular".